005. Un retrato de Jesús
Transcripción
Las personas hablan sobre los Salmos mesiánicos y hay una manera en la cual cada salmo es mesiánico; cada salmo tiene referencias al carácter central de la narrativa redentora: Jesús.
Bien, estamos pasando un año en los Salmos —qué maravilloso año de estudio bíblico va a ser este— y estamos viendo maneras de entender el contenido de los Salmos. Hay una quinta cosa que creo que podría ser la más importante de entender sobre los Salmos: los Salmos nos dan un retrato de Jesús.
Podríamos argumentar que los Salmos son un gran dedo que apunta a la persona y obra del Mesías: el Salvador, el Cordero, el Señor Jesús. Las personas hablan sobre los Salmos mesiánicos, y hay una manera en la cual cada salmo es mesiánico. Cada salmo tiene referencias al carácter central de la narrativa redentora: Jesús. La Biblia es la biografía de Jesús, por lo que tendría sentido que en el centro de la Biblia se encuentre este increíble retrato de Jesús.
Hay tanta más revelación sobre Jesús en los Salmos: su carácter, su misión, su sufrimiento, que Él es la esperanza prometida para el pueblo de Dios. No importa cuál sea la generación del pueblo de Dios, Jesús es la esperanza prometida. Los Salmos apuntan a su resurrección y a su reinado final. Jesús como Salvador, Jesús como el Cordero, Jesús como la esperanza prometida, Jesús como el Rey resucitado y ascendido.
Un ejemplo aparece al inicio de los Salmos. Creo que hay una razón de por qué está al inicio de los Salmos: porque nos explica de qué se tratan los Salmos. Es el Salmo 2; se titula «El Reino del ungido del Señor» y termina de esta manera:
Ciertamente anunciaré el decreto del Señor
Que me dijo: «Mi Hijo eres Tú,
Yo te he engendrado hoy.
Pídeme, y te daré las naciones como herencia tuya,
Y como posesión tuya los confines de la tierra.
Tú los quebrantarás con vara de hierro;
Los desmenuzarás como vaso de alfarero» (Salmo 2:7-9).
«Pídeme, y te daré las naciones como herencia tuya […]. Mi Hijo eres Tú, Yo te he engendrado hoy». ¿De quién más podrían hablar estas palabras sino de Jesús? Recuerda cuando Jesús fue bautizado por Juan, la voz del cielo dijo: «este es mi Hijo amado en quien me he complacido». Este es el Hijo engendrado. ¿Quién es el que reina sobre las naciones? Bueno, esa afirmación se cumple en Efesios 1 donde dice que Él gobierna sobre todo principado, dominio y poder, y que Él reina sobre todo por el bien de su cuerpo, la iglesia.
Los Salmos comienzan apuntando a Jesús, como el Hijo engendrado del Padre. Y el Padre le da las naciones a Él y dice: «te he nombrado para reinar como Rey de reyes por siempre».
Lo que el Salmo 2 nos dice que hagamos es que a medida que leemos los Salmos, busquemos a Jesús en los Salmos. Él es el héroe de la historia de los Salmos.
Si me preguntaras: «ok, Paul, tú has estudiado los Salmos, ¿cuál es la esperanza que los Salmos nos ofrecen?». Yo diría muy rápidamente: la esperanza de los Salmos es Jesús. ¡Él es el héroe, Él es la esperanza! ¡Cuando leas los Salmos, busca a Jesús!
Preguntas para la reflexión personal o para la discusión en grupo
- ¿De qué maneras los reyes y los gobernantes de este mundo se ponen a sí mismos contra el Señor? ¿Cómo están desafiando a Dios aquellos a quienes Él les ha otorgado un poder temporal y cómo usan ese poder para menospreciar la ley, la santidad y el orden creado por Dios? Cuando aquellos con autoridad hacen esto e impacta tu vida diaria o amenaza tu comodidad, ¿cómo reaccionas? ¿Lo haces con ira por miedo y para defenderte o estás descansando en la autoridad suprema y el Reino eterno de Dios? ¿Qué nos enseña el Salmo 2 acerca de cómo Dios reacciona cuando los líderes del mundo se mofan de su gobierno?
- ¿Qué poder o ámbito de autoridad, independientemente de lo pequeño que sea, te ha confiado Dios? ¿Cómo puedes crecer en sabiduría y servir al Señor con temor y temblor en esta área? Sé específico. ¿Cómo puedes representar mejor a Jesús en tu rol de autoridad? ¿Cómo has abusado y mal usado la influencia que se te ha confiado? Comparte tus defectos y pídele a otros sabiduría, ayuda y rendición de cuentas.
Preguntas para conversar con niños
Para niños más pequeños: ¿quién está a cargo de tu vida? ¿A quién necesitas obedecer? ¿Quiénes son algunas de las personas que establecen reglas que debes seguir? ¿Cuáles son las reglas que necesitas cumplir? ¿Qué ocurre si no cumples estas reglas? ¿Es fácil o difícil cumplirlas? ¿Sabías que Dios está a cargo de todas las personas que están a cargo de ti? ¿Sabías que Dios hace reglas para las personas que hacen reglas para ti? ¿Qué crees que ocurre cuando las personas desobedecen las reglas de Dios?
Para niños más grandes: ¿quiénes son las figuras de autoridad en tu vida? ¿Cuáles te gustan y por qué? ¿Qué es lo llamativo de la manera en que ellos ejercen el poder? ¿Quién no te gusta y por qué? ¿Cómo han usado mal o abusado del poder que les ha sido dado? ¿Qué entrenadores, profesores o pares en puestos de liderazgo aman demasiado su poder y les encanta recordarte que ellos están a cargo? ¿Vives con miedo de quienes están en el liderazgo? ¿Transas hacer lo que sabes que Dios dice que es correcto por lo que aquellos que tienen poder dirán o te harán? ¿De qué maneras tus luchas con estas figuras de autoridad son principalmente tu problema y no de ellos? En otras palabras, aun si la manera en que ellos ejercen control es imperfecta, ¿te desagradan porque, en primer lugar, no te gusta someterte a la autoridad? ¿De qué maneras luchas con la autoridad de Dios en tu vida hoy?