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Reseña: Por fin libre
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Reseña: Por fin libre

Con Satanás y el mundo empeñados en tentar sexualmente, ¿qué esperanza tenemos de vivir una vida de santidad y pureza sexual? En Por fin libre, Heath Lambert busca responder esta pregunta al apuntar a nuestra única fuente de esperanza: la gracia perdonadora y transformadora de Dios. Con un corazón pastoral y años de experiencia como consejero bíblico, Lambert descomprime la centralidad de la gracia en la lucha contra la pornografía mientras entrega ocho estrategias para buscar la pureza que son sumamente prácticas y llenas de promesas del Evangelio. Estas herramientas empoderadas por la gracia en la lucha por la pureza son el dolor, la rendición de cuentas, las medidas radicales, la confesión, tu cónyuge (o tu soltería), la humildad, la gratitud y la relación dinámica con Jesús. El capítulo introductorio de Lambert se centra en la gracia como el fundamento de nuestra lucha contra la pornografía. Este capítulo es importante y vale más que el precio del libro. Él resalta que la gracia de Dios en Cristo no solo nos entrega perdón de pecados; también nos transforma y rompe nuestro vínculo con el pecado. Con razón debemos celebrar la gracia perdonadora de Dios, pero también necesitamos la gracia transformadora y empoderada por el Espíritu para llegar a ser como nuestro Salvador. La gracia del Evangelio debe fortalecer y respaldar todas las estrategias o no veremos un cambio perdurable en nuestra búsqueda de la pureza. Lambert desglosa los pasos esenciales de arrepentimiento de acuerdo al acrónimo «CAP»: Confesar, Afirmar que Dios perdona tu pecado y Pedirle a Jesús la gracia necesaria para cambiar. Este acrónimo me ha servido no solo para aconsejar a quienes luchan con la pronografía, sino que también a nivel más general en el ministerio pastoral y en mi propia búsqueda de santidad personal. La discusión de Lambert sobre las diferencias entre un dolor piadoso y mundano en el capítulo 2 es inmensamente útil. Nos recuerda que nuestro pecado en el fondo es contra Dios y que el arrepentimiento que trae el Espíritu va mucho más allá de sentirse mal; más bien, es una disposición a cambiar sin importar el costo. En el capítulo 3, Lambert desafía a los grupos de rendición de cuentas infructuosos, en los cuales los miembros se reúnen principalmente para confesar el fracaso. Al contrario, su argumento es que la rendición de cuentas debe centrarse más en tener compañeros y compañeras de armas que alienten a la fidelidad al recordarse mutuamente la verdad bíblica y el Evangelio. Lambert también desafía a sus lectores a tomar medidas radicales en su búsqueda de santidad, particularmente al cortar el acceso a la pornografía. Les recuerda a sus lectores que estas medidas radicales nunca son convenientes y siempre son costosas, pero el verdadero arrepentimiento estará dispuesto a tomarlas. Lambert también se centra en utilizar provechosamente la confesión para luchar contra la pornografía. Desafía la tendencia a ser llaneros solitarios entre evangélicos y el impulso a esconder nuestra vergüenza cuando pecamos con la pornografía. Al enfatizar el principio de sustitución de «sacarse» los viejos pensamientos y «ponerse» nuevos, él pasa un capítulo entero comparando a la mujer prohibida de Proverbios con el regalo de una esposa piadosa. Lambert también sostiene que la búsqueda del placer sexual temporal fuera del pacto del matrimonio está totalmente enraizada en nuestro orgullo, egoísmo y codicia. Cuando enfocamos nuestras vidas en nosotros mismos, en vez de en Dios y los demás, estamos operando funcionalmente como si nosotros fuéramos el centro del universo. Por lo tanto, debemos matar nuestro orgullo y nuestros impulsos de querer tomar aquello que no es legítimamente nuestro al levantar nuestros ojos hacia la grandeza de Dios y a la gracia inmerecida que nos ha sido dada. Meditar en el carácter de Dios y su gloriosa obra de salvación nos humilla y vuelve a calibrar nuestros deseos para que concuerden con su voluntad. Los argumentos en Por fin libre están enraizados en la Escritura y construidos sobre el fundamento de la gracia transformadora de Dios. La promesa del porno (y la de cualquier otro pecado) es que satisfará nuestros deseos. Sin embargo, nada de lo que Dios haya creado nos satisfará más que Él mismo. Las estrategias y los grupos de rendición de cuentas no son suficientes para vencer a los corazones duros y a las conciencias cauterizadas. Necesitamos que el Espíritu Santo aplique la gracia de Dios en la obra consumada de Cristo. Necesitamos perdón y transformación. La exégesis reflexiva de Lambert, las estrategias prácticas y el enfoque en el Evangelio ayudará a muchas personas a descubrir la gracia que necesitan para vencer el pecado y la tentación. Me hubiera gustado que Lambert hubiera pasado más tiempo abordando a quienes están solteros y luchan con la pornografía. Sin duda, el contenido del libro puede ser fácilmente aplicado a cualquier circunstancia de la vida, pero la mayoría de los ejemplos e ilustraciones a lo largo del libro se centran en personas casadas y en sus cónyuges. No obstante, esta crítica es menor. Yo pastoreo en un contexto rural. Aunque los miembros de nuestra iglesia aman a Jesús, pocos aman leer. Si es que voy a recomendar un libro, tengo que hacer que valga la pena. Quizás, entonces, la mejor recomendación que puedo hacer de este libro es regalarlo regularmente a los miembros de mi iglesia y usarlo en grupos de discipulado y en consejería. Con preguntas de discusión útiles al final de cada capítulo, Lambert ayuda a los lectores a ir más allá de la información hacia la aplicación personal. También he encontrado que el enfoque en el Evangelio y las estrategias empoderadas por la gracia que emplea ayudan a los cristianos a no solo luchar contra la pornografía, sino que también los empodera para buscar la santidad en el resto de sus vidas.

Por fin libre: luchando por pureza con el poder de la gracia. Heath Lambert. Poiema Publicaciones, 192 páginas.

Esta reseña fue publicada originalmente en 9Marks.