Tuve una profunda sensación de déjà vu leyendo Sexo, romance, y la gloria de Dios. Me tomó sólo unas cuantas páginas darme cuenta de que este libro, en forma condensada, forma la base de un capítulo de Sexo y la supremacía de Cristo (editado por John Piper y Justin Taylor). Yo había disfrutado ese capítulo particular de dicho libro y tuve la certeza de que disfrutaría igualmente esta versión extendida.
Sexo, romance, y la gloria de Dios se basa de modo general en el Cantar de los Cantares de Salomón. C.J. Mahaney comparte mi propia visión de este libro de la Biblia afirmando, simplemente, que «habla de sexo». Aunque muchos han intentado alegorizar el libro de los Cantares, pocos lo han logrado con algún grado de credibilidad. «Así es, caballeros», dice Mahaney, «los Cantares de Salomón constituyen todo un libro de la Biblia dedicado a promover la intimidad sexual dentro del pacto matrimonial. Es un festín de ocho capítulos de una desenfrenada, desinhibida y gozosa inmersión en expresiones verbales y físicas de pasión entre un hombre y una mujer». Amén. Así que, a medida que el lector se prepara para leer este libro, debe prepararse para celebrar el don divino del sexo. El autor dice: «El propósito del libro que tienes en tus manos es conducirnos de regreso al ideal divino de una sexualidad alegre, carente de vergüenza, indulgente y amorosa en el contexto del matrimonio». Este libro se dirige principalmente a hombres, en gran parte porque es el rol del esposo conducir a su esposa a una comprensión más plena de lo que la Escritura enseña sobre la sexualidad. Mahaney provee el fundamento sobre el cual los hombres podrán descubrir con sus esposas el modo en que el sexo y el romance pueden glorificar a Dios.
Luego de un capítulo introductorio, Mahaney da a conocer el propósito divino del matrimonio. Dicho propósito, señala, es el de reflejar la relación entre Cristo y la iglesia. En el siguiente capítulo, pasa a ofrecer un consejo que, a juicio de él, es el más importante de todo el libro: «Para que el romance se haga más profundo, antes de tocar el cuerpo de tu esposa debes tocar su corazón y su mente».
Luego siguen varios capítulos en que Mahaney presenta formas específicas de tocar el corazón y la mente de una esposa con el fin de construir el tipo de relación que Dios desea para un matrimonio. Pasando al acto concreto de la consumación, sigue la dirección de Salomón sin dar muchos detalles específicos que pudieran sonar como una lista de deberes. En lugar de eso, nos invita a estudiar y comprender el libro de los Cantares para entender lo que Salomón quiso decir cuando escribió: «Despierta, viento del norte, y ven, viento del sur; hagan que mi huerto exhale fragancia, que se esparzan sus aromas. Entre mi amado en su huerto y coma sus mejores frutas» (4:16).
El libro concluye con un capítulo escrito por Carolyn Mahaney (esposa de C.J.) para las mujeres. Es el capítulo cinco de su libro Feminine Appeal: Seven Virtues of a Godly Wife and Mother [Atractivo femenino: Siete virtudes de una esposa y madre piadosa].
Con mucho humor (gran parte de él a costa de sí mismo) pero también compasión y sensibilidad, Mahaney expone algunos principios que darán mucho fruto en muchos matrimonios. Él es honesto sobre su libro: «Por favor no cometas el error de pensar que sólo por leer este libro vas a cambiar. Ojalá fuese así de fácil. Sin embargo, el cambio no se produce mientras no apliquemos lo aprendido de maneras muy específicas, en momentos muy específicos, y dependiendo siempre de la gracia de Dios para que nuestros esfuerzos tengan efecto». Este libro es sólo el comienzo. Lejos de ser un libro del tipo «10 maneras infalibles de hacer que tu mujer se derrita», Sexo, romance, y la gloria de Dios hará que el marido vea a su esposa como un extraordinario tesoro de Dios. Hará que el marido llegue a ver a su esposa en colores mientras todo lo demás aparece simplemente en blanco y negro.
Aunque parezca extraño, este libro renovó mi alegría de ser cristiano. Me asombró la sabiduría de Dios, quien consideró adecuado darnos todo un libro de la Biblia para enseñarnos cómo amar a nuestras esposas de una forma que le honre a Él. ¡En verdad su Palabra es suficiente! ¡En verdad es relevante! Me sentí agradecido de que Él haya provisto maestros que nos expliquen la Palabra, y mi gratitud hacia Él se renovó por darme el inestimable tesoro que es mi esposa.
Así que, varones, compren este libro. No puedo imaginar a un marido que no se beneficie de él. Y, mujeres, compren una copia y entréguensela a sus esposos con un guiño insinuante. Él captará la idea. Léanlo, disfrútenlo, y por sobre todo, pónganlo en práctica. Descubran cómo el sexo y el romance pueden glorificar a Aquel que los creó para nuestro disfrute.