Durante los últimos dos años, nos hemos preocupado por nuestra salud física como nunca antes. Un virus tan pequeño, y que no podemos ver a simple vista, nos llevó a tomar medidas básicas de higiene que antes no eran motivo de preocupación. El nivel de ventas de productos para sanitizar se disparó en el mercado durante el primer año de la pandemia, al punto de agotarse en los supermercados. ¿Por qué? Porque en el fondo nos preocupa nuestra vida.
¿Qué pasaría si tuviéramos la misma preocupación por un tipo de pandemia que es incluso más letal y que ya ha infectado a miles? Como bien sabrás, la pornografía ha estado presente hace muchos años y ha estado dañando silenciosamente. Sin embargo, no hemos dimensionado sus efectos destructivos en nuestras vidas y en las de los demás. Si lográramos ver el daño que la pornografía puede producir en nuestras mentes y corazones, quizás buscaríamos desesperadamente algún tipo de producto para «sanitizar» y evitar el daño. Si somos honestos, la realidad es que muchos de nosotros hemos terminado acostumbrándonos a la presencia de la pornografía en nuestras vidas y hemos cedido terreno por no combatirla.
No obstante, ¡la batalla no ha terminado! Y una buena manera de comenzar a recuperar terreno en esta área es este libro. Si bien ya existen muchos libros sobre este tema —y muy necesarios—, Deepak Reju hace algo un poco diferente.
Pornografía: una lucha por la pureza es un libro en formato devocional; es decir, contiene una serie de reflexiones para tu meditación. Esto significa que tu acercamiento a este libro debe ser diferente. No es un recurso para ir a consultar del tema cuando necesites, sino, como bien dice el autor, un plan de batalla diario que tiene el fin de mantener tu corazón alimentado durante 31 días.
Las 31 reflexiones diarias que encontrarás son breves pero profundas. Están llenas del mensaje del Evangelio y buscan llevarte desde la reflexión teológica hacia la aplicación práctica. Cada día tratará un tema diferente, basado en un pasaje de la Escritura. Los temas no están desconectados unos de otros como para poder saltar los días según tu elección, sino que están presentados progresivamente.
El autor comienza ayudándonos a evaluar nuestra propia identidad y nos invita a abrir nuestros ojos a la realidad de la batalla que tenemos por delante, siendo realistas y conscientes de lo que tenemos disponible en Cristo. Luego, nos lleva a identificar los deseos más profundos de nuestros corazones, de tal manera que aprendamos cómo funciona y se aplica el Evangelio en el terreno correcto, llegando así a la mitad de los días de reflexión con el desafío apremiante de aprender a realizar buenas rendiciones de cuentas, ya que esta es una batalla que se libra junto a otros soldados. De hecho, el autor enfatiza constantemente la necesidad de caminar genuinamente con otros. Probablemente, este es uno de los aspectos más difíciles de llevar a cabo en este plan. Será muy difícil avanzar si acaso no abrimos este tema a otros cristianos maduros que puedan ayudarnos en un contexto de confianza y amistad.
En los últimos días de reflexión, el autor, luego de explicarnos lo crucial que es recibir y experimentar el perdón de Cristo para comenzar a dar fruto, nos lleva a considerar algunos aspectos concernientes a la lucha contra las tentaciones y a nuestro carácter en ello. Y finaliza con una hermosa imagen de la Biblia sobre el final de la historia: libres de la pornografía y en una perfecta relación con Dios. ¡Qué mejor manera de terminar!
Todo el contenido y formato del libro lo hace accesible y aplicable tanto para hombres como para mujeres; para nuevos creyentes o creyentes maduros, y para trabajar tanto de manera personal como en pareja.
No quisiera dejar de mencionar el apéndice que puedes encontrar al final de este libro. Es una especie de artículo que trata el tema de la masturbación y cómo deberías entenderla desde una perspectiva bíblica. Este apéndice es tan importante como el resto del libro, ya que, según Reju, el tema de la masturbación siempre está relacionado a la pornografía y puede continuar siendo una práctica mucho tiempo después de haber dejado de consumirla.
Por todas estas razones, este libro es un gran recurso para hacer frente a la terrible pandemia de la pornografía. Un arma necesaria en la batalla por la pureza. Espero que estés dispuesto a ser confrontado, pero, a la vez, a ser reconfortado diariamente por el Evangelio a medida que avanzas en el plan. Que Dios te permita experimentar la plena libertad al conocer al Único que puede sanitizar, restaurar y purificar tu corazón.