018. Salmo 29: la batalla por el asombro
TRANSCRIPCIÓN
La gran pregunta en la vida es: ¿qué asombro capturará tu corazón y dirigirá tu vida? Esa es la batalla espiritual. Hay una batalla por el asombro en toda nuestra vida.
La semana pasada estaba viendo el Canadian Open (un torneo de golf), que terminó con un duelo de cuatro hoyos entre dos golfistas; fue muy emocionante. Y lo último que ocurrió fue que uno de los jugadores estaba muy cerca, pues su bola estaba muy cerca del hoyo, y el otro jugador estaba enfrentando un putt de casi 22 metros de largo. Y en una sola jugada, este golpeó la pelota, viajó los casi 22 metros, cayó justo en el hoyo y ganó el torneo. ¡Twitter [X] se encendió!
Ahora, en mi locura, en ese momento, pensé en el Salmo 29. Puesto que el trasfondo del Salmo 29 es este: que Dios nos ha diseñado para el asombro. ¡Nos encantan las cosas asombrosas! Nos encanta cuando un torneo termina con algo tan inimaginable. Amamos el pastel de chocolate de siete capas. Nos encanta una buena pieza de música dramática, una tremenda película o una gran novela. Amamos el chirrido de un gran filete; amamos un hermoso atardecer; nos encanta el beso de un ser humano en nuestra mejilla. Estamos diseñados para el asombro.
Y la gran pregunta en la vida es: ¿qué asombro capturará tu corazón y dirigirá tu vida? Esa es la batalla espiritual. Hay una batalla por el asombro en toda nuestra vida. Y el Salmo 29 se trata de esto:
Tributen al Señor, oh hijos de los poderosos,
Tributen al Señor gloria y poder.
Tributen al Señor la gloria debida a su nombre;Adoren al Señor en la majestad de la santidad.
Voz del Señor sobre las aguas.
El Dios de gloria truena,
El Señor está sobre las muchas aguas.La voz del Señor es poderosa,
La voz del Señor es majestuosa.
La voz del Señor rompe los cedros;
Sí, el Señor hace pedazos los cedros del Líbano;Y como becerro hace saltar al monte Líbano;
Y al monte Sirión como cría de búfalo.
La voz del Señor levanta llamas de fuego.
La voz del Señor hace temblar el desierto;
El Señor hace temblar el desierto de Cades.La voz del Señor hace parir a las ciervas
Y deja los bosques desnudos,
Y en su templo todo dice: «¡Gloria!».El Señor se sentó como Rey durante el diluvio;
Sí, como Rey se sienta el Señor para siempre.
El Señor dará fuerza a su pueblo;
El Señor bendecirá a su pueblo con paz.
Es como si el salmista estuviera diciéndote: «¿quieres asombrarte de algo? ¡Asombrate de esto!». Él simplemente grita sobre el poder y la gloria de Dios.
¿Qué captura el asombro de tu corazón? ¿Qué te emociona? ¿Qué motiva tu vida? Tributar al Señor la gloria que merece su Nombre no es algo que haces sólo con tu mente, sino que también con la manera en que vives tu vida.
¿Buscas oportunidades para apuntar a la gloria de Dios? ¿Buscas vivir de una manera que refleje su gloria? ¿O vives como un ladrón de gloria, intentando tomar la gloria para ti mismo?
Dios es glorioso en fuerza, poder y autoridad. Él es glorioso en santidad todo el tiempo, en todos los sentidos. Él es glorioso en gracia, derramando su fortaleza en su pueblo y dándoles paz.
Mi oración por mí mismo y mi oración por ti es que mi vida sea formada y mi corazón sea gobernado por un asombro profundo, perdurable e inquebrantable de Dios; ese asombro de Dios me capturará y me hará vivir por algo mucho más grande que yo mismo.
Preguntas para reflexión personal o discusión en grupo
- ¿Cuáles son las cosas en tu vida que te llevan a un estado de asombro? Sé específico al considerar esas cosas por medio de los cinco sentidos que Dios te ha dado: gusto, tacto, vista, olfato y audición. Examina cómo vives tu vida y haz un inventario de las áreas que te motivan, te emocionan y te inspiran. ¿Qué captura tu corazón?
- ¿Por qué crees que puede ser difícil para ti asombrarte y darle gloria a Dios cuando Dios es Aquel que merece todo el asombro y la gloria? ¿Cuáles son algunas áreas específicas de tu vida donde luchas por no robarle a Dios la gloria que sólo Él merece? De nuevo, sé específico y honesto con Dios.
- Ahora, toma un momento y ora para que tu corazón, tus pensamientos, tus palabras y tus acciones sean un reflejo vivo de alguien que está capturado por la gloria de Dios. Ora para que Dios te transforme cada día en una persona que se asombra más y más de Él.
Preguntas para conversar con niños
Para niños pequeños: ¿qué has visto que te ha hecho decir: «¡eso es asombroso!»? ¿Cómo te sentiste en ese momento? ¿Qué pasaba en tu mente y en tu corazón? ¿Por qué crees que fue asombroso? ¿De qué maneras crees que Dios podría ser más asombroso que eso? Si no vivimos como si Dios fuera lo más asombroso que vemos y experimentamos aquí en la tierra, ¿qué crees que podemos cambiar sobre nosotros mismos para poner a Dios al principio de la «lista de asombro»? Tomemos un tiempo ahora para orar a fin de que Dios cambie nuestros corazones y nos ayude a verlo a Él como el más asombroso del universo.
Para niños más grandes: ¿qué es lo más asombroso que has visto o experimentado jamás? ¿Qué lo hizo tan asombroso para ti? ¿Qué crees que significa asombrarse de algo o alguien? ¿Alguna vez te has asombrado de Dios? Si ha sido así, cuéntame esa experiencia. Si no ha sido así, ¿por qué crees que nunca has experimentado un asombro de Él? ¿Por qué crees que muchos cristianos no viven como si Dios fuera el más asombroso del universo? ¿Cómo piensas que tú y yo podemos cambiar intencionalmente para vivir como si realmente creyéramos que Dios es asombroso?